El responsable de realizar el TAC exigió a la policía que volvieran a esposarlo cuando los agentes le quitaron las esposas para ser introducido en la máquina.

 

ETXERAT. El pasado viernes 29, Gorka Fraile, preso político vasco encarcelado en la prisión de Badajoz (750 km), fue conducido por la Policía Nacional al hospital de la localidad para realizar el TAC que determinará la evolución del cáncer de lengua diagnosticado en Marzo de 2015. El preso realizó todo el trayecto esposado pero antes de ser introducido en la máquina para la exploración requerida, los agentes que le custodiaban, procedieron a retirarle las esposas; el gesto más lógico tratándose de una tomografía. Sin embargo, el encargado de realizar el TAC, exigió a los policías que volvieran a esposarlo. Ni los razonamientos del preso vasco sobre su situación, ni la presencia en todo momento de la custodia policial en la sala, ni la irregularidad de introducir en el tomógrafo un objeto metálico, evitaron que el médico insistiera en su exigencia. Finalmente, Gorka Fraile fue esposado de nuevo. Esto, dificultó seriamente que pudieran ponerle la vía necesaria para el contraste, imponiendo al preso vasco una situación dolorosa además del lógico nerviosismo.

Etxerat recuerda así mismo que hace un año en el mismo hospital cuando se le practicó la intervención quirúrgica para la resección del carcinoma de la lengua, se le mantuvo esposado todo el tiempo hasta el momento de la intervención quirúrgica. Durante la noche se obstaculizó continuamente el descanso del paciente con ruidos, voces, amenazas y golpes en la pared por parte de las fuerzas policiales y, finalmente, la policía entró y se mantuvo en el quirófano durante el curso de la intervención.

La asociación quiere denunciar la actitud, carente de toda ética profesional, del responsable de la realización de la tomografía, que sometió a una persona gravemente enferma a una situación injustificable e innecesaria. La Asociación conoce la actitud de médicos que exigen que a los presos y presas les retiren las esposas para realizar la consulta o exploración en las condiciones necesarias, pero es la primera vez que se da la situación contraria. En este punto, Etxerat recuerda que en el Informe realizado por un grupo de europarlamentarios mostraba especial preocupación por el acceso al tratamiento y control médicos de los presos gravemente enfermos. La situación vivida por el Gorka Fraile demuestra que hay motivos fundados para esa preocupación.

Tanto la familia del preso vasco como sus abogados, interpondrán denuncia ante el juzgado y los organismos correspondientes. Por su parte, Etxerat, Asociación de Familiares y Amigos de Presas y Presos Políticos Vascos asegura que no admitirá que los derechos de sus familiares encarcelados queden a disposición de cualquier persona, cargo o entidad que quiera manejarlos a su antojo y que seguirá trabajando para dar a conocer esta y otra situaciones, exigiendo el respeto de los derechos de todas las personas.

Etxerat recuerda también que esta misma semana, el Pleno del Ayuntamiento de Antsoain, localidad en la que residen la compañera y la hija del preso vasco, aprobó una moción en la que solicita la aplicación de prisión atenuada para Gorka Fraile, a fin de que pueda recibir una correcta asistencia médica, que alivie en lo posible su sufrimiento y el de sus familiares. La moción fue aprobada con los votos a favor de IU, Geroa Bai y EH Bildu, mientras UPN y PSN se abstuvieron anunciando su voluntad de no votar en contra. De igual manera, El ayuntamiento de Durango exigió la semana pasada la liberación de Fraile mediante una moción presentada por la plataforma local a favor del preso. La moción ha salido adelante gracias a los votos de EH Bildu y PNV. El texto, además, rechaza la política penitenciaria. PSE-EE por su parte, rechazo apoyar la moción y presentó una alternativa. El Partido Popular no voto a favor de ninguna de las dos, y declaró que la competencia está en instituciones penitenciarias.